Industria de la construcción
Pocos procesos han cambiado el mundo de la construcción de manera tan fundamental en los últimos 30 años como la tecnología de chorro de agua a alta presión.
Originalmente visto como una forma exótica de ingeniería, con un espectro de aplicación limitado, hoy en día los chorros de agua a alta presión son reconocidos como lo último en ingeniería de construcción.
Entre otras cosas, este desarrollo se debió a la introducción e implementación de nuevas regulaciones para la restauración de la construcción y la protección del medio ambiente.
Los chorros de agua a alta presión son comercialmente superiores a cualquier otro método por el uso de eliminación selectiva de material y la minimización o eliminación de materiales residuales sujetos a las normas de eliminación.
Esta es la base de la garantía estándar y la razón decisiva por la que un número creciente de empresas de construcción confían en las bombas de alta presión Woma y las unidades de chorro de agua a ultra alta presión.
Preparación de superficies:
Las tecnologías de chorro de agua a alta presión marca Woma permiten aplicar la medición precisa de la fuerza sobre el material que se va a procesar.
Para ello, se controlan la presión y el caudal en relación con el objeto.
El resultado, una superficie limpia y rugosa como base de carga a largo plazo para un nuevo revestimiento y la garantía de una alta resistencia al desprendimiento.
Además de los beneficios técnicos, la compatibilidad ambiental y la eficiencia económica hablan a favor del uso de la tecnología de chorro de agua a alta presión.
- Limpieza de superficies de concreto, piedra natural, ladrillo y metal
- Limpieza de fachadas y edificios
- Eliminación de hollín, polvo y suciedad
- Eliminación de revestimientos y pintura de superficies, plantas y componentes
- Retiro de óxido en superficies de acero y barras de refuerzo
- Desbaste de superficies de concreto para generar superficies rugosas con suficiente adherencia para aplicación de pintura
- Eliminación de pintura, mortero, revestimientos y capas de pintura sueltas antes de aplicar material nuevo
Hidrodemolición
A diferencia de un martillo neumático, cuya aplicación de fuerza penetra profundamente en la junta y se transfiere al interior del edificio, los chorros de agua a alta presión son muy locales y están dirigidos a la posición a tratar.
Esto significa que casi ningún sonido transmitido por la estructura se transfiere a la construcción y se evita la formación de grietas por tensión.